Y punto.

Querido alguien, pensé que dos personas eran una, decía que el amor no entiende de barreras hasta que conocí el orgullo, imaginaba el mundo como un regalo que me dieron por nacer hasta que me presentaron la falsedad y los engaños de la gente que hace que vivas en un mundo de mierda... Sé que no todo es color de rosa, que las amistades vienen y van pero alguna se quedará, que se trata de seguir por encima de todo y pasar, nadie está ni estará por encima de ti, el pasado quedó atrás y es cuestión de vivir el presente, porque todo se va y nada vuelve... Aprendí que jugar con fuego al final quema, que la verdad duele y que las mentiras tienen sus propios pies y acaban saliendo. Que cada día hay que ser más fuerte porque o como yo o no me come nadie, que si caigo me levantaré como si nada, que el llorar me libera, deja salir lo peor de mí... Las lágrimas me las tragaré, juzgar por juzgar es un vicio que cada vez se pega más, primero conocer luego hablar. La música me impulsa a un nuevo mundo, motivándome, haciendo olvidar las penas, que todo se paga nada queda impune, que cuando yo esté arriba tú caerás por como me trataste antes... La injusticia, la envidia, el odio, el rencor, la felicidad, la alegría, la depresión, el respeto, la solidaridad, el amor, la ilusión, los sueños, que todo son parte de mi vida, de la tuya, de la nuestra... Querido alguien, tienen que pasar los años para madurar y darnos cuenta de las cosas que hemos perdido y de las que encontraremos, porque todos nos cobramos incluso tú, alguien, las penas de los demás.