! ◊ Polvo de Luna ◊

La velocidad, cunde, vuela, se pasa, se termina, comienza, corre, hulle... El tiempo incontrolado, un manejo del azar, del destino, la espera, esperanzas, sueños, metas...  Desesperarse no cuesta, la paciencia llega a un límite. El límite puesto por nosotros, nada lo tiene, ni lo crea. La luz del final del camino, siempre la habrá, es nuestra pequeña salvación...
Esas pisadas que marcaron el inicio de todo, de volver, de irse, aquí estoy con las mismas pisadas que ayer y pisando en el mismo suelo... Volví para nacer y nazco para irme y morir, trazo una línea con mis dedos, que será la carretera hacia mi final en este mundo por el cuál pasaré los buenos y malos momentos, mejores y peores, pasado, presente, futuro... Mi acompañante?, mi sombra grabada, el cielo con sus nubes cinceladas en estela, el sol de cada mañana , el amor de alguien, el odio de la gente, la fama del sueño, la envidia, el rencor, la felicidad a escasos centímetros de mí, la libertad a mi lado esperando... Las estrellas, las miradas silenciosas que ni hablan ni escuchan en la oscuridad de la noche que no acaba, las mañanas frías en esos despertares de sábanas calientes, las palabras que se las lleva el viento en ecos profundos que llegan a las almas, dibujo erráticos círculos por mis ojos, despierto, abro los ojos, me encuentro a mí misma en la peor depresión de todas: en el querer y no poder... El silencio fruto de no hablar por romper a llorar, las lágrimas la sabiduría de las cosas buenas y malas, me embalo, freno, grito, suspiro, sigo estando aquí, en la ventana, trazando la carretera de mi vida...