re-nacer, re-hacerse ante la violencia de todo este mundo

21 abr 2013

Conciencia se llamaba


Quizás hablaste en sueños, bailando entre la oscuridad de la noche.
Quizás dormías al compás de brazos, inundando la cama de cualquier reproche.
Llorabas entre las sábanas, que te arropaban de calor artificial.
Era espectadora de tu suicidio.

Escuchaste mi nombre pronunciar de tu boca, a lejanías del amor. 
Esa voz, pero nítida cierta voz.
Gritas y te acobardas, lloras y te despiertas, la niña pequeña avanza.
Lo volví hacer y lo sé, recalqué la verdad.

Podía soportar cada añoranza, cada lágrima, cada risa amarga,
cada quejido callado y melancólico.
Podía soportar a tu vida junto a la mía.
Juntas de la mano iríamos, incondicionalmente.

Pero sé que no te rendías, que estabas por y para algo,
y que morirías conmigo a mi lado, pasara lo que pasara.

Te sentía sola e invisible, pensando en el mañana que pronto
sabrías que llegaría.
Dudabas de ti misma, el amor se te apagaba.

Y que el resto de la vida pasa, como pasó mi cara por tu mirada.
Como pasan los años entre los dedos, como mueres cada día que te toco.
Y lo volví hacer, lo sé, soñé con tu realidad.

Quizás te propagas entre la luz, iluminando mi camino o al contrario.
Quizás eres más fácil que el viento cortado de invierno.
Que la lluvia en medio de la calle, que el silencio mal escuchado.
Pero, sigo ahí, guiándote.

Siempre evitando la verdad, aprovechando la mentira pasajera.
Siempre inventando las ilusiones, siempre alegre intentando ser feliz.

 Soy yo.
Siempre tu conciencia la que salva.
quizás por ironía,
quizás por mí, por ti.
Quizás.





20 abr 2013

En la distancia



En la distancia
Como en la vida, quién no gana, no pierde,
quién no arriesga, no supera,
quién no justifica, no perdona,
quién nos salva, no muere.

En la distancia
Como el silencio, se posa cada recuerdo,
se preguntan las palabras,
se duerme el sueño,
se sonríen las penas.

En la distancia, como en la traición,
en la distancia, como en los sueños, 
en la distancia, como yo,
en la distancia, como en mi vida,
quedé entre eso, entre distancia y razón.




13 abr 2013

II


Sucias manos rozaban mi cuerpo,
con cansada mirada anhelando la muerte,
ya que, mi cuerpo era la espina que colmaba
cada toque de su estropeada piel.

Con sus yemas prolongaba el malgastado cariño
que poco consideraba tenerle, con sus yemas solo
conseguía calmar la poca paciencia que podía quedarme.

Se alargaba, colmando de besos cada centro de placer,
no quería que lo notara, era imposible, mis ramificaciones no mentían.
Era suya, él lo sabía por poco tiempo.

Era presa de un maldito depredador desquiciado en mí,
loco de rabia, loco de amor, de sexo, de ultraje. 
Era mi marido, mi insaciable y asqueroso hombre, yo, 
su reina, postrada para él, contra él. 

Su desvanecida y viciosa sonrisa me aniquilaba,
haciéndome recordar que tenía el poder, que tomaba el control
de mis manos y me dejaba desmadejada encima de él.

Cada látigo de mirada lasciva hacía mis ojos
me hacía enmudecer, 
pensando que pronto será mañana para dejar de pensar
que mi corazón estaba rompiéndose
con cada toque de este minúsculo y mal valioso hombre.

Dormida entre sus brazos y sábanas calientes,
frías sin amor, quedé despedida de este
que pronto murió dentro mi.



I


Nadie era mi nombre,
centelleando y raspando tu boca.
Vestía para alguien,
nadie significaba tu vida entera.

Todo es su corazón, tu mirada en la mía.
Todo será mi sombra a sus pies,
el compás de tus pisadas.
Nadie iguala a Todo.
Todo hunde a Nadie.

Nadie sabe como Todo fue, es y será alguien que quebró sus pocas ganas de sentir, llorar, gritar y volar. Todo supo como acabar con la vida misma de Nadie.







5 abr 2013

Than the rest



Era tarde, viernes de Febrero, con tequila en la mano y en la otra el cigarro de cuántas veces fue...
El frío quemaba la cara, se sentía?, me pregunté. La calle empezaba a ralentizarse, el resto se consumió en escarcha escasa, y me pregunté: quedaba algo más que el resto de nuestra existencia?.
Queda algo más que este invierno sin sentimiento?
¿Somos solo palabras inventadas y echos incoherentes de los que olvidamos la parte del recordatorio y nos quedamos con la buena memoria de las malas jugadas?. Supongo que estaremos hechos de cada pieza escrita, de cada compás a kilómetro perdido y de cada acorde con entonación errónea. Pero también sé que podemos cambiar por una bonita sonrisa de lado a lado, por una mirada serena, por un mundo pequeño pero divino, que podemos soñar lo que seremos y convertirnos en el mejor partido que una madre podría desear, que tu padre se emocione al pensar que su hijo era la bondad en medio de este campo de almas perturbadas entre humos alcohólicos de soledad, emborrachados en envidias pasajeras, rencores largos y tendidos e inocencias sin desarrollarse. Que te griten a los cuatro vientos que eres y serás la mejor persona que cambió y revolucionó mi vida. Que el resto quede en nuestros corazones hambrientos de buena vida, optimismo y paz y que el viento solo se lleve las lágrimas que algún día dolieron al surcar nuestra cara. Que perduren nuestras alegrías como perduramos nosotros estando jodidamente jodidos porque cariños somos libres y locos de amor. Que los para siempre existirán si queremos durar eternos y jóvenes hasta el fin de nuestros días. Que seremos el recuerdo de los que vendrán y la sombra de nuestros antepasados. Queda algo más que este invierno sin sentimiento?, quedaba algo más que el resto de nuestra existencia?. Yo, de momento tengo mi sonrisa, mi cigarro y mi último tequila como recurso.

4 abr 2013

Perdida era

Y siéntate, y contempla tu rostro,
mezquino y divino por fuera, delirio por dentro. 
Que tu mirada perdía almas,
y tu corazón pedía el subsuelo.
Siéntate y déjate llevar en la amargura, 
presa de tu vida, amiga de la mía.
Alma libre de una eterna estrella en el universo,
alma rota de una corta llama de esperanza.
La hermosura te la regalaron los ángeles y 
esos ojos verde miel eran los míos por la noches, 
los nuestros durante el día.
Y siéntate, y mira al mundo cómo te mira a ti, 
una belleza efímera, un pájaro a su disfrute.
Te hundiste en tu sueño del cual no te dejas irte.
No tengas miedo a volar, ni a vivir en tu ilusión.
No llores por tu depresión, no llores por volver.
No brindes por acabar, ni aplaudas por morir.
No despidas la paz, ni sonrías al destino.
No tengas miedo a errar en tus defectos porque serán nuestras virtudes.
Que tu latido sea más fuerte que el eco del silencio.
Y que ames con toda la fuerza que te dicte tu corazón.
No recuerdes frágiles memorias, ni imagines olvidos pasados.
Quédate en el presente y ponte en el lugar del futuro.
Eres dueña de tus desgracias, ama de tus debilidades.
Persigue el horizonte, rescata al amor puro.
Descansa sin temor.
Susurra tu último aliento con ardor... al fin de tu existencia.

Eres libre amor.